La bronquitis se trata de una inflamación del recubrimiento de los bronquios, que conectan la tráquea con los pulmones. Este hecho provoca que entre y salga menos aire en los pulmones. Como consecuencia, se tose mucho y puede venir acompañado de esputo o flemas.
La bronquitis puede ser breve (aguda) o crónica cuando la tos es duradera y no existe otra enfermedad que la origine. Se manifiesta con mayor frecuencia en periodos invernales y puede ser causada por un virus, bacterias o gérmenes como Mycoplasma pneumoniae y Chlamydia
Normalmente cuando los niños y bebés padecen bronquitis no es necesario un tratamiento antibiótico. Conviene que estos beban abundante líquido y si la tos fuera seca, se recomienda dar un antitusígeno. En cambio, si esa tos viene acompañada de secreciones no se les debe dar medicamentos para cortar esa tos ya que contribuyen a retener las flemas en los pulmones.
La infección suele durar en torno a una semana, aparte de beber mucho líquido se recomienda descansar, utilizar humidificadores, no fumar cerca del niño y si el niño tuviera fiebre paracetamol.
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