Aunque aún nos quedará algún día “fresco” en Zaragoza, llega el calor y los meses donde el sol predominará y los pequeñ@s deben estar protegidos…
No olvidéis que los bebés menores de 6 meses no debéis exponerlos directamente al sol. Su piel no produce tanta melanina como en adultos por eso resulta más que necesario extremar las precauciones puesto que los lactantes son especialmente sensibles a la radiación solar.
En mayores de 6 meses es bueno exponerlos al aire libre para activar la Vitamina D. Aún así, es necesaria la Protección Solar y no olvidar que la radiación UV atraviesa las nubes por lo que siempre debemos estar alerta. Gorra o sombrero y gafas de sol (si las toleran) siempre son recomendables. Evita también exponerles al sol entre las 12 de la mañana y las 16 h. que es cuando es más intenso, aunque lleven protección solar.
Según la Academia Española de Dermatología «existe mayor protección con prendas de fibra sintética (poliéster, lycra, nylon, acrílicos), colores oscuros o brillantes, alta densidad (mejor mezcla de algodón que seda) y elásticas
(prendas ajustadas)»
Es cierto que cada vez estamos todos más concienciados con los peligros de la radiación solar. Hay tres peligros que puede ocasionar el sol: quemaduras, golpes de calor o, el más temido por todos, cáncer de piel…
Pero también, con moderación y siguiendo unas pautas el sol también tiene efectos beneficiosos para la salud…
La Vitamina D calcifica los huesos y actúa en la regulación del sistema defensivo. La dermatitis atópica y otros trastornos de la piel mejoran notablemente ante la exposición solar.
Por eso, bien protegidos y teniendo en cuenta estos consejos, disfrutemos del verano en familia.
En Centro Pediátrico San Francisco te asesoraremos y te daremos todas las pautas para que puedas disfrutar del sol y del verano.